Manchas: Una historia con final feliz

Manchas es un perrito abandonado que conmovió los corazones de los caraqueños.

La historia de Manchas es el reflejo de la situación que viven los animales en  Venezuela, debido a que muchas personas han emigrado y en consecuencia abandonan a sus mascotas.

Este fue uno de los primeros casos de abandono y esto llamo la atención de las personas, por lo que todos se avocaron a encontrar una solución con un final feliz.

Las redes sociales fueron una vitrina para mostrar el caso de Manchas.  Así que Aida López – Méndez, quien es una mujer de gran corazón, rescatista y proteccionista independiente tomo las riendas de este caso.

A continuación narraremos la historia de rescate y posterior adopción de Manchas.

Manchas abandonado por sus dueños

En el contexto actual de Venezuela muchas personas han decidido emigrar en búsqueda de mejores condiciones de vida.

Muchas de estas familias tienen la conciencia de planificar su viaje junto a sus mascotas. En cambio, otras familias simplemente se deshacen del animal como si nada. Este es el caso del perrito llamado Manchas que fue abandonado por su familia.

Este noble animal permaneció varios días en la entrada del edificio donde vivían sus antiguos dueños. Afortunadamente los vecinos lo alimentaban, pero corría peligro de ser atropellado.

En vista de que la “familia” no aparecía, este animal se movió de sitio y se quedó en una calle ciega ubicada en Los Palos Grandes en Caracas. Allí era alimentado por los vecinos.

Luego alguien subió la información a las redes sociales para ubicarle un hogar temporal a este animal.

Es allí cuando entra en acción su Ángel terrenal, Aida López – Mendez. Ella lo rescata para brindarle un cálido hogar temporal.  Seguidamente lo publica por las redes sociales para darlo en adopción.

Esta historia causo mucha indignación en la población en general, pues este animal fue abandonado como un juguete en medio de la calle.

En ese momento, esto no era tan común por allá en 2017. Después de eso la situación se normalizo y era común ver animales de raza abandonados por sus “dueños”.

Una posible adoptante en los Estados Unidos

Una amiga de Aida López – Méndez que vive en Estados Unidos vio las fotos de Manchas y se enamoró del perro. Esta mujer le manifestó la idea de brindarle un hogar definitivo al perro.

Al respecto Aida López – Méndez  mencionó lo siguiente:

“Mi amiga me manifestó con gran emoción que a ella le encantaba Manchas y lo adoptaría si estuviera allá en Estados Unidos. Fue cuando se me prendió el bombillo y le dije que quizás se lo podría llevar. A lo que ella de manera muy protocolar me respondió “vamos a échale pichón”.

A partir de allí, se dio inicio a una serie de diligencias correspondientes a los papeles de Manchas.

Afortunadamente este caso recibió gran apoyo económico y moral de la gente. Asimismo  la adoptante corrió con el resto de los gastos. Estos gastos para la adoptante fueron bastante pequeños gracias al enorme apoyo de la gente.

Además, el Dr. Cornelio Burman facilito el préstamo del  kennel para poder trasladar al perro a los Estados Unidos. Cabe resaltar,  que esta es una de las cosas más caras que hay.

Estos fueron los preparativos para el gran viaje a su hogar definitivo.

Manchas es un hermoso mestizo enrazado de pastor ovejero. En el momento en que fue adoptado Manchas tenía aproximadamente  un año

Viaje a los Estados Unidos

Aida López – Méndez tenía un viaje pendiente a los Estados Unidos, así que esta fue la oportunidad perfecta para llevar Manchas a su hogar definitivo.

Esto disminuye mucho los costos del viaje de perro al exterior. Debido a esto su rescatista fue un baluarte fundamental en todo el proceso.

Para ello, Aida López – Méndez, se encargó de todos los trámites para el viaje y la adoptante se encargó de costearlos. Entre ellos requisitos estaban las vacunas y el certificado de salud. Cuando todo estaba en orden, Aida y Manchas pudieron viajar a Miami, rumbo al nuevo y maravilloso hogar de Manchas.

En la actualidad, este perrito vive muy feliz en una casa preciosa. A Manchas, lo pasean todos los días y lo llevan a un parque espectacular.

Este es un típico parque para perros americano, es gigantesco e incluso cuenta con una piscina para los animales.

A Manchas paso de ser un perro abandonado a ser un perro consentido, amado y adorado. Una segunda oportunidad que le cambio la vida para siempre.

Con la premura del viaje Manchas no tuvo tiempo de ser castrado. Sin embargo, un par de meses de después fue castrado en una jornada gratuita en el condado donde vive.

En síntesis

Podemos ver que las segundas oportunidades existen y que cuando hay disposición de ayudar todo es posible.

Gracias al apoyo incondicional de su rescatista Aida López – Méndez, el DR. Cornelio Burman, el apoyo de su adoptante y de las personas que brindaron sus aportes económicos se hizo realidad un final feliz para Manchas.

Así que Manchas se convirtió en perro amado y respetado por su actual familia.

Finalmente, este es uno de los  testimonios de rescate y adopción que hacen homenaje al lema: Adopta, No compres.